Pasó la consulta popular y el respaldo a la modificación a la Carta Orgánica fue masivo. Sin embargo, falta que se expida el Tribunal Superior de Justicia cordobés
El resumen de lo que dejó el histórico referéndum del fin de semana pasado en Colonia Caroya podría resumirse en un par de frases: “Ganó el sí en Colonia Caroya y habrá reelección” por un lado, y “Fue masivo el apoyo de los electores a la reforma de la Carta Orgánica de la ciudad”, por el otro.
Sin embargo, sobre ambas afirmaciones pende una espada de Damocles porque el Tribunal Superior de Justicia de Córdoba tiene que resolver la cuestión que judicializó la oposición: si fue o no constitucional y, por tanto, válida la ordenanza que dio origen al referéndum posterior. Esto es, si se podía aprobar solamente con mayoría simple o necesitaba doble lectura y mayoría agravada.

Desde el interbloque de Cambiemos, el concejal Amílcar Ñáñez expresó esa duda con claridad: “El Tribunal Superior de Justicia de Córdoba no se ha expedido sobre la cuestión de fondo, la constitucionalidad de la ordenanza. En ningún lugar del país se modificó un instrumento legislativo constituyente como la Carta Orgánica a partir de una mayoría simple. Esto sienta un pésimo precedente para el constitucionalismo argentino”.
Y en diálogo con Radio Jesús María, el intendente Gustavo Brandán adelantó que no se quedará de brazos cruzados si el TSJ le falla en contra. Deslizó que podría llevar la causa a la Corte Suprema de Justicia de la Nación si fuese necesario.
Mal argentino: el tiempo

Más allá de la tranquilidad que muestra el oficialismo que cumplió con todos los pasos administrativos para dejar vigente la enmienda a los artículos 96 y 246, tras promulgar la resolución de la Junta Electoral Municipal ordenanza y jurar el pasado jueves con los funcionarios electivos la modificada Carta Orgánica (como era de esperar, la oposición no se hizo presente en ese acto).

El problema de fondo son los tiempos. Si el TSJ no falla antes de noviembre o diciembre, la feria de enero, traslada la cuestión a 2019. Si falla a favor del oficialismo todo sigue como hasta ahora, pero si falla en contra y la cuestión la tiene que resolver la máxima autoridad judicial de la Nación, los tiempos superarán el plazo que tiene el municipio para realizar la elección de 2019 y que será en julio, tal como dicta la Carta Orgánica. En cualquiera de las dos opciones, y con este escenario hipotético, Brandán será candidato a la reelección.
Esto lo sabe a la perfección la oposición y también sabe que tiene 11 meses para preparar su propio candidato y también para decidir si hacen lista única entre la UCR y Acción Caroyense/PRO.
Un escenario de cuatro candidatos, como en 2015, favoreceá al oficialismo que, con la foto de hoy (el resultado del referéndum), correría con alguna ventaja.
Qué dice la foto

El domingo pasado fue altísimo el porcentaje de participación que alcanzó el referéndum: el 62%, los caroyenses empadronados fueron a votar, muchos más de los que fueron a las PASO de 2015. De ese 62%, el 79% decidió votar por el sí a la enmienda de la Carta Orgánica para permitir la reelección que estaba vedada. 7545 electores votaron por el sí; y 2932, por el no, que representaron el 70% y un poco menos del 30%, respectivamente.
Parte de esa masiva aprobación podría interpretarse como un aval a la actual gestión y a la posibilidad de que su actual cnductor repita por un período más, hasta 2023.
De todos modos, no habría que confundir expectativas con decisiones porque falta casi un año para que los caroyenses vuelvan a las urnas y es un tiempo más que suficiente para que el electorado cambie de opinión o ratifique este rumbo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario