
El acuerdo contempla la creación en la ciudad del denominado Paseo de la Memoria, en la ribera del río Guanusacate, a la altura de barrio La Costanera.
El proyecto, cuyo diseño específico empezará a ser definido ahora por las parte intervinientes, tiene por objetivo integrar la memoria histórica a la ciudad a través desarrollo de un espacio público permanente para recordar a las víctimas de la última dictadura cívico militar, reflexionar sobre los acontecimientos producidos en ese período histórico, reivindicar el Estado de Derecho y promover la plena vigencia y defensa de los Derechos Humanos.

Excepto la concejala Verónica Búa, el resto se pronunció en contra con una serie de argumentos vagos y extemporáneos.
Tal fue el contraste de miradas que en el parte municipal el Ejecutivo señaló: “A 43 años del último golpe militar, seguimos reivindicando la memoria histórica y demandando verdad y justicia, para decir por siempre: ‘Nunca más’”.
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