Desde el jueves pasado, el exembajador en Ecuador y exintendente de la ciudad de Córdoba, Luis Juez, es el nuevo abogado del viudo de María Eugenia Cadamuro. Juez reemplazará en esa tarea al abogado Julio Secondi cuyos primeros aportes fueron bien importantes para la causa.
Y a poco de desembarcar en Jesús María hizo declaraciones fertes sobre la causa. Fue la primera vez que un abogado patrocinante señaló a Jeremías Sanz como autor material del hecho, pero descreyó que, con 21 años, haya tenido la capacidad para pergeñar él sólo el homicidio y lograr el ocultamiento del cuerpo durante 90 días.
Para el penalista hubo autores intelectuales y cómplices en el asesinato de la mujer. Y les anunció que debieran comenzar a preocuparse porque va por ellos.
Momentos antes de que Juez se entrevistara con la prosecretaria de la fiscalía de Instrucción de Jesús María, Analía Cepedes, la sopresa fue el acercamiento que hizo Víctor, el hermano mayor de María Eugenia, Y consideró ese gesto como un espaldarazo para la causa: “Él está preocupado para que la verdad llegue. Hay algunos más preocupados y otros que no están para nada preocupados, pero que se empiecen a preocupar los que han logrado un año de inmunidad, de impunidad, cuando la justicia miraba para otro lado. Todos los que tengan que ver con esta atrocidad de haberse llevado puesta la vida de una mujer que lo único que quería era defender lo propio tendrán que dar explicaciones”.
El abogado penalista con 30 años de experiencia y comprometido con la política desde 2003 no tuvo reparos en incluir entre los cómplices a las personas que cruzaron infinidad de llamadas telefónicas con Sanz entre la noche del 15 de marzo y la madrugada del 16.
“Hay innumerables llamadas entre Jeremías, Nicolás (Rizzi, amigo de Jeremías) y Mabel (Cadamuro, hermana de la víctima) y alguien más (Facundo González, pareja de Mabel Cadamuro). Tampoco los voy a engañar porque ahí no había escuchas telefónicas. Lo que tenemos es el entrecruzamiento de llamadas que determinan que ciertos celulares hubo llamadas entrantes y que salieron. ¿Qué se dijeron? Eso no lo sabemos, Está claro que hay una serie de conductas sospechosas”, expresó el abogado en Tribunales.
Juez recordó que está en marcha la pericia del Instituto de Genética Forense sobre los dos pares de guantes hallados en la escena del crimen y que espera con ansias el resultado para ver si de ahí se puede desprender algún otro hilo.
Salir de la autoría material
Para Juez, hasta ahora, la tarea de la Fiscalía no fue mucho más allá de acreditar la autoría material del hecho, pero denunció que en todo lo posterior al crimen en sí mismo hubo una red de encubrimiento que fue evidente y manifiesto.“Jeremías no podría haberse manejado con el nivel de impunidad con que se manejó después de haber cometido ese hecho delictivo, y ese cadáver no podría haberse enterrado de la manera en que se enterró y esa forma de sustraerse ante esa mirada. Está claro que vamos a intentar darle otro giro a la causa”, aseveró Juez.
El flamante abogado de una de las partes querellantes dijo que intentará que la causa no se eleve a juicio sin antes haber logrado por lo menos algunas imputaciones más. “Vamos a intentar que sea esta etapa, con prisión preventiva para algunos que podrían haber participado directamente. No estamos discutiendo si Nicolás (Rizzi) era amigo de Jeremías, estamos discutiendo qué sabía sobre ese hecho ni bien sucedió”, añadió.
A la salida de Tribunales, Víctor Cadamuro opinó: “Si realmente lo hizo y fue así (por el crimen que le atribuyen a Jeremías) tendrá que pagar las consecuencias. No es fácil encontrar la verdad, pero en algún momento salta”.
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