Con un almuerzo de menú clásico y generoso, el Festival de Doma y Folklore de Jesús María celebró su primer cincuentenario de vida. Fue el sábado 16 de mayo en el salón Pampa que la Sociedad Rural tiene en Malabrigo.
Expresidentes, exvicepresidentes, exfundadores, excolaboradores, y personajes de todos los tiempos (academias de danzas, músicos, jinetes) fueron desfilando por el escenario para ir recibiendo sus distinciones que dejaron constancia de su paso en estos 50 provechosos años.
Mereció un párrafo aparte la presencia de don José Baldo, tío del actual presidente del Festival y uno de los fundadores y que en breve cumplirá 100 años. José se prestó a una charla con los medios de prensa presentes para narrar su experiencia: “Estoy bastante emocionado porque ya estamos cerca de los 100 años y tengo la satisfacción de decirle a la gente más joven ‘gracias por lo que están haciendo’ porque para mantener esto hay que poner muchas horas de trabajo, mucho pensamiento, muchas cosas. Gracias al periodismo que siempre nos acompañó y nos dio aliento para que llegaramos a esto”.
“Siempre -añadió José- dije que el Festival de Jesús María nació con los pantalones largos, no nació como nosotros lo habíamos pensado sino que nació diez veces más grande que lo que pensábamos. Hemos puesto bastante fuerza para que puedan seguir”.Respecto del reparto de utilidades, se anunció que la cifra a repartir, tras la edición 50, llegó a la friolera de 3,68 millones de pesos.
Con visible alegría por el resultado económico, Hugo Baldo, se refirió a la ocasión del festejo: “Hemos venido creciendo todos los años, en público, en ganancias, y eso me parece que explica cómo ha sido nuestra gestión. Pero serán los de afuera quienes evalúen cómo fue realmente”. La fiesta pasó, pero la satisfacción seguirá un tiempo.
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