En la sesión del pasado jueves, los concejales de Jesús María aprobaron con pocas modificaciones el proyecto que en su momento presentó el Partido Socialista de Jesús María y que fue avalado por sus compañeros de bloque del oficialismo.
La ordenanza tenía por objeto regular la ocupación de las veredas para la instalación de mesas, sillas y sombrillas en bares, confiterías, heladerías, restaurantes, kioscos y otros locales vinculados a la gastronomía en todo el ejido de la ciudad.
Queda claro de la redacción de la nueva norma que los comerciantes deberán solicitar un permiso de ocupación y que, fuera del rubro gastronómico, no habrá permisos para otro tipo de negocios respecto de la ocupación de veredas.
Esos permisos de ocupación serán otorgados en forma precaria y temporaria, deberán ser renovados anualmente, y obligará a los comerciantes a contratar un seguro de responsabilidad civil derivada de daños a terceros.
En las veredas se delimitará una “zona exclusiva de tránsito peatonal” y una “zona de ocupación permitida”. La zona exclusiva de tránsito peatonal ocupará una superficie de un metro con cincuenta centímetros medidos desde la línea de edificación hacia el cordón de la vereda en todo su largo. En dicha zona quedó prohibida la ocupación con cualquier tipo de elementos.
También y a los efectos del ascenso y descenso de los vehículos que se estacionen frente a las veredas, deberá dejarse libre de ocupación un superficie de ochenta centímetros medida desde el cordón de la vereda y hacia la zona de ocupación permitida.
En las esquinas, por ser una zona de confluencia de tránsito no se permitirá colocar ningún tipo de mesa, silla, ni sombrilla.
Y respecto de los cerramientos, la norma acordó que se permitirá solamente en zona de ocupación permitida un cerramiento lateral pero que nunca abarque ochavas ni esquinas.
La norma implica un enorme avance en términos de accesibilidad en tanto y en cuanto se obligue su cumplimiento.
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